Las iglesias continúan creciendo en un país del Norte de África, donde el extremismo islámico oprime a aquellos que practican la fe cristiana.
"Si usted ve a su hijo de repente perdonando, alegre, feliz, escuchándole, no discutiendo, hablando de no odiar, estos son las señales de que ellos asisten a una iglesia clandestina. Eso es una amenaza para su familia", dijo un padre cristiano.
El reciente boletín de la organización continúa detallando algunas de las condiciones más reales y amenazadoras en las que los creyentes viven en esa región del continente africano, relatado por el proyecto "people on the ground", de la red cristiana de televisión por satélite "SAT-7".
"No podemos celebrar la cena regularmente en cualquier lugar", explicó un cristiano de Argelia. "Sería muy peligroso y atraería la atención de las autoridades, estamos siempre vigilados, siempre cambiamos nuestros lugares de encuentro y llegamos a horarios aleatorios, usando rutas diferentes, todo el mundo está siempre vigilante".
El miembro de la iglesia doméstica también explicó que cuando la policía localiza alguna casa o establecimiento donde se reúnen cristianos, usan el abuso de autoridad para oprimirlos.
"Cuando las autoridades encuentran una iglesia clandestina, ellas entran en la sala, llevan todos nuestros celulares, todos nuestros ordenadores, cualquier cosa que puedan usar para extraer información para encontrar otros como nosotros. Ellos buscan enlaces a redes de cristianos, especialmente que se ha convertido en una de las más antiguas de la historia de la humanidad.
"Ellos nos confrontan:" ¿Quién es su maestro ?, ¿dónde están sus Biblias ?, ¿quién es su pastor, usted es ilegal, propagando enseñanzas falsas e ilegales, muéstren su licencia para enseñar, usted no está registrado! "no hay razón, nuestros maestros y pastores son detenidos, que desaparecen por días, semanas o nunca más se ven", agregó.
Pero ni siquiera toda esa opresión ha sido suficiente para detener el avance del evangelio en la región. Iglesias continúan bautizando a cientos de personas y fortaleciéndose a cada obstáculo vencido.
"El crecimiento de la iglesia ha sido fuerte en mi país", dijo otro cristiano argelino. "Pero recientemente las iglesias fueron sometidas a una represión del gobierno, con varias de ellas cerradas. Cada tres meses, nuestra iglesia realiza un bautismo, a veces para más de 100 personas. Entonces el gobierno cerró nuestra iglesia, junto con otras cuatro Pero eso no para el trabajo, porque cuanto más problemas y persecución las iglesias se enfrentan, más fuertes se quedan ".
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