Si quieres pasar un fin de semana lejos del tráfico, haz palomitas, ponte frente a tu televisor y enciende tu consola. Para empezar, los videojuegos nos enseñan a aprender de los errores, ya que al equivocarnos en múltiples ocasiones o perder en algún nivel, nos hace seguir intentando en lugar de estancarnos. Incluso, nos invita a crear nuevas estrategias y buscar alguna forma de seguir adelante.
En segundo lugar; nos ayudan a establecer objetivos o sea, conseguir algo que deseamos y para ello, ponemos mucho énfasis en cada paso que damos sin importar si nuestra meta es a corto, mediano o largo plazo.
En cuanto a los fracasos, los enfrentas de una mejor manera. Esto quiere decir que no te afecta emocionalmente si las cosas no salen bien desde un principio. El fracaso no es algo que puedas evitar; aunque saber reaccionar ante ellos, es algo básico.
Podríamos seguir diciéndote muchísimos beneficios de jugarlos; ya que fomentan la convivencia, la competencia sana y muchas otras cosas que estamos seguros que tendrás en cuenta la próxima vez que no te dejen jugar. ¡Diviértete!
Fuente: sdpnoticias / MF
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