Retiro espiritual en la grita resultó ser un «Plan Vacacional»

Problemas familiares y un presunto fanatismo religioso terminaron activando un operativo de búsqueda que se desplegó por más de tres días en la zona montañosa del Táchira, con el fin de ubicar a 16 personas que habían sido reportadas como “desaparecidas”, pero que finalmente fueron localizadas “sanas y salvas” en la finca El Rodeo del Páramo La Negra, ubicada en los límites con el estado Mérida, donde se encontraban de “vacaciones” en un retiro espiritual.

Una denuncia formal por la falta de comunicación entre algunos familiares de los supuestos “desaparecidos” y un “fanatismo religioso” evidenciado en el comportamiento de Rosa García, líder del grupo carismático, llevaron a un despliegue de gran magnitud en el que se temía por la integridad de los niños.

“Llegamos al sitio, estaban en oración, en un retiro espiritual, en un plan vacacional”, dijo en horas de la madrugada de este viernes, Juan Carlos Escalante, alcalde del municipio Jaúregui, luego de haber culminado el operativo de búsqueda de las 16 personas.

“Ahí hay una situación de orden familiar. Creo que debemos respetar”, mencionó Escalante, debido a que uno de los principales motivos que conllevó a toda esta movilización de los grupos de rescate, fue el no haber notificado a los parientes de un adolescente, que este permanecería más de un mes incomunicado en el retiro espiritual.

Wilman Rivera, jefe de Seguridad Ciudadana de Táchira, señaló que la acción de los cuerpos de seguridad no se habría activado si no se hubiese presentado la denuncia formal.

Sin embargo, Lisbeth Gutiérrez, madre del adolescente supuestamente “desaparecido”, quien esperó con otros familiares toda la noche hasta casi el amanecer por la llegada del operativo en las adyacencias de la sede del Cicpc de La Grita, denunció que su hijo habría sido llevado “bajo engaño por la abuela”.

Enfatizó que su mayor temor fue que el grupo estaba liderado por una mujer que, al parecer, mostraba “actitudes de una persona que no está cuerda”. Le preocupó los comentarios que decía el padre de su hijo (expareja) sobre las acciones percibidas como “fanatismo”, que le ordenaban a ejecutar al adolescente dentro del grupo carismático.

Aunque las autoridades informaron que las personas fueron localizadas en buen estado de salud, aún se desconoce los resultados del estudio psicológico de los integrantes de las familias presuntamente desaparecidas.

También se conoció que se podrían establecer sanciones penales a quienes pudiesen hacer “bullying” a alguna de las 16 personas, principalmente al adolescente, cuando lleguen a sus lugares de residencia.

Al finalizar los respectivos chequeos médico-forenses, las dos familias decidieron retornar a sus viviendas, aunque habrían dejado insumos y alimentos en la montaña donde, según su agenda, faltaba una semana para culminar el “plan vacacional”.